Realizan en CUCSH Belenes realizó el Foro: “22 de abril 30 años de impunidad e indolencia gubernamental”
El Departamento de Estudios Políticos/Academia de Historia y Derecho y el Doctorado en Ciencia Política del Centro universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), organizaron el Foro: “22 de abril 30 años de impunidad e indolencia gubernamental”, en el Auditorio 1 del Edificio I del CUCSH Campus Belenes.
En el evento participaron, el Dr. Armando Zacarias Castillo, jefe del Departamento de Estudios Políticos del CUCSH, la Sra. Lilia Ruíz Chávez, de la Asociación 22 de Abril en Guadalajara, Dr. Rubén Martín, de Radio Universidad de Guadalajara, Dr. Jorge Regalado Santillán, del Departamento de Estudios sobre Movimientos Sociales (DESMOS) y el Dr. Jorge Ceja Martínez, Coordinador del Doctorado en Ciencia Política del CUCSH.
El Dr. Ceja Martínez detalló que “el pasado 22 de abril se cumplieron 30 años de las explosiones que tuvieron lugar en el sur-oriente de la ciudad de Guadalajara, el llamado sector Reforma. TTodo bajo control, fue lo que las autoridades dijeron respecto a los señalamientos de las personas que percibían el olor a gasolina de los lavabos, drenajes, fregaderos de casa y calles”.
El coordinador del Doctorado en Ciencia Política señaló que “las afectaciones se dieron en más de 10 kilometros de calles y según las cifras oficiales, en las que nadie cree, hubo 212 personas fallecidas, mil 500 personas lesionadas, mil 142 casas afectadas y negocios dañados así como millonarias pérdidas económicas”
Además, el académico del CUCSH dijo que “fueron demasiadas explosiones para tan pocas aclaraciones, por ello creció la desconfianza, la intranquilidad y la inseguridad. Desde entonces los vecinos y transeúntes que sobrevivieron a las explosiones debieron rehacer sus vidas, muchos de ellos ya murieron y murieron en espera de justicia, impunidad, promesas incumplidas, represión y el abandono”.
En su intervención, la Sra. Lilia Ruiz Chávez comentó que “el día de hoy, a 30 años de las explosiones merecemos que nos escuchen, que nos volteen a ver, que se nos haga justicia, que deje de haber impunidad, que se nos de dignidad. 30 años significan una vida completa para un ser humano, sin embargo, esos 30 años que han pasado no han sido suficientes para resolver un poco el daño que nos causó la tragedia del 22 de abril”.
“Muchos compañeros sobrevivientes de la tragedia han muerto, pero afortunadamente seguimos algunos vivos para que así el gobierno trabaje en el caso. Con las explosiones del 22 de abril fuimos una herida total con nuestro cuerpo, aquel suceso mató e hirió a muchas personas. Cada uno tratamos de hacer un esfuerzo por aprender a vivir, pues de un día para otro se nos cortó un pedazo de vida”, enfatizó.
El Dr. Rubén Martín comentó que “es muy importante que la ciudadanía conozca los hechos mas relevantes, y sin duda alguna, las explosiones del 22 de abril de 1992 es uno de ellos. Puede decirse que es la mayor tragedia urbana que esta ciudad ha padecido. Esta tragedia fue y sigue siendo un calvario para los damnificados y afectados”.
El periodista mencionó que “esa misma noche, miles de personas se quedaron sin hogar, porque miles de casas desaparecieron. Recuerdo algo que me dio mucha rabia y me lleno de indignación. La escuela vocacional se ofreció como albergue, entonces, por la noche llego el arzobispo de Guadalajara Juan Jesús Posadas Ocampo, y mucha gente le dijo al Cardenal que interviniera para que no se metiera la maquinaria, pues era posible que aun estuvieran familiares bajo los escombros, a lo que el Cardenal, de la manera mas fría solo les dijo “Resignación”.
El Dr. Jorge Regalado compartió su testimonio personal y mencionó que “me tocó ver una de las primeras explosiones, venia circulando, junto con toda mi familia, por la Calzada Independencia de Norte a Sur. Justo pasábamos por la calle Aldama, cuando vimos la explosión. Sentimos como el suelo, el subsuelo crujía, tronaba, y de repente vimos a una pipa que volaba por los aires. Todo era un desastre, todos se hizo un caos”.
El académico del CUCSH explicó que “en las noticias del extranjero, los medios de comunicación señalaban en sus noticieros que Guadalajara había explotado. Hubo quienes de manera cínica y despreciativa mencionaron que no se tenia que hacer tanto escandalo porque había sido una porción muy pequeña de la ciudad. Recuerdo esta expresión de un arquitecto, José Luis Cuellar”.
El académico del CUCSH explicó que “hace 30 años, producto de la negligencia criminal del exgobernador Guillermo Cosío Vidaurri, del expresidente municipal de Guadalajara Enrique Dau Flores, y del mayor Trinidad López Rivas, jefe del Cuerpo de Bomberos y, sobre todo, de los funcionarios de PEMEX, murieron un numero indeterminado de personas que vivían o transitaban por los barrios Analco, Las Conchas, De La Luz, de las Calles 20 de noviembre, de las Colonias Atlas y Quinta Velarde. Tanta muerte, destrucción y dolor se hubieran evitado si los gobernantes hubieran advertido del riesgo real y hubieran desalojado a la población a tiempo”, concluyó.