Narran libreros locales sus experiencias en el mundo del libro en Guadalajara
Participan en CUCSH en la charla: “Deconstruyendo la librería. Prácticas más allá de la venta de libros”
El Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH), en el marco de “Guadalajara Capital Mundial del Libro”, mediante el Deparamento de Letras, llevó a cabo la charla: “Deconstruyendo la librería. Prácticas más allá de la venta de libros”, en la que participaron: Rosa Muro, Librería Ferragus; Gabriela Vázquez Bonilla, Librería Lopa; Marco Antonio Gabriel, director de Ediciones El Viaje y Librero de Viejo, quienes moderados por la Dra. Luz Eugenia Aguilar, jefa del Departamento de Letras del CUCSH.
LA Dra. Luz Eugenia Aguilar mencionó que “conversando con libreros, con editores, con egresados de la Licenciatura en Letras Hispánicas, nos percatamos que es muy difícil sostener una librería pequeña, o una editorial, una librería especializada en temáticas. Y esta es la oportunidad de escuchar qué hacen estos pequeños empresarios, pequeñas empresarias, con las librerías y qué sucede también con el ámbito cultural”.
La académica del CUCSH, señaló que “puede ser una especie de cliché, el pensar que es natural el que algunas librerías tengan espacios para presentaciones de libros, para lecturas, incluso, para exposiciones u obras de teatro. Las pequeñas librerías trascienden esta ecuación, pues son librerías culturales, que organizan programas culturales y tienen interés en la formación de públicos, y esto es el reto que permite pensar en la reconceptualización del concepto de librería”.
Por su parte, Gabriela Vázquez Bonilla, describió a la Librería Lopa como “una librería independiente, un espacio donde confluyen los libros y la lectura con el café y la cultura, pero, sobre todo, donde se encuentran personas que buscan una librería consagrada con su selección y curaduría de títulos clásicos, y con una que acompañe a las editoriales independientes en sus proyectos y propuestas, así como ofrecer títulos que las causas sociales demandan para nutrir sus luchas con ideas”.
Vázquez Bonilla señaló que “Lopa es un proyecto muy emocional. Yo soy desarrolladora humana, terapeuta, algo así como psicoterapeuta, y la verdad jamás me imaginé tener una librería, campo que es un gremio totalmente nuevo para para mí. Lo que me mantiene firme en este proyecto, es el equipo de todos los que colaboramos en la librería. Para mí el ser librero es destino, realmente nunca me imaginé tener una librería, pero se ha convertido en algo mágico para mí”.
“En Lopa, somos una librería independiente, buscamos que esté viva, sobre todo por las personas que la visitan. Tenemos la mayoría de las editoriales independientes de Guadalajara y aspiramos a tener la mayoría de las editoriales independientes de México. No estamos peleados con las grandes editoriales, porque sabemos que es imposible competir con ellos. Nosotros en Lopa, buscamos ese trato personalizado, fortalecernos lo que nos hace diferentes a las grandes librerías, que es que llegues y te sientas en casa, que puedas encontrar gente que ama los libros y que te puedan hacer una recomendación o que pueden platicar contigo”.
En su oportunidad Rosa Muro de la Librería Ferragus, explicó que comenzó a trabajar en el mundo librero “desde hace mucho tiempo en una librería que estaba debajo del Hotel Fénix del centro de la ciudad. Empecé a trabajar en la Librería Ediciones de Cultura Popular, una librería que estaba abajo del Hotel Fénix, la cual era del Partido Comunista de aquel entonces. Estuve durante un periodo de cerca de 5 años llevándole a los investigadores y profesores de las diferentes universidades, los libros que ellos me pedían, y se los llevaba en la mochila a su lugar de trabajo, pues ellos tenían cargas horarias completas y yo me decidí a acercarles las novedades editoriales”.
Rosa Muro mencionó que no le parece justo que las editoriales grandes internacionales compren a las librerías pequeñas porque “al tener ello, los derechos de las pequeñitas editoriales, solamente lo que más se vende es lo que promocionan, y así muchas editoriales clásicas o autores clásicos, se pierden y ya no se pueden leer porque los libros no están a la venta, motivados por estos grandes”.
En tanto, Marco Antonio Gabriel, comentó que es un monstruo el hacer libros: “pero es súper interesante y súper hermoso. 17 años tengo con mi editorial, antes estuve con otras editoriales, con editoriales muy interesantes, y muy buenas de aquí de Guadalajara o de Jalisco”
Al salir la carrera de Letras Hispánicas, decidí abrir mi propia editorial, he intentado distribuir los libros por todas partes, he cometido algunos errores y después he visto algunos aciertos, pero algo muy importante, casi primordial, es la distribución, tengo amigos editores que empezaron siendo distribuidores antes de editores y la verdad eso les zanjó un montón este el trabajo”.
Marco Antonio Gabriel explicó que tuvo que abrir una librería “para darme cuenta cómo es el trabajo real, abrí un año mi librería, era librería cafetería, pues yo tenía este sueño de llegar tomarte un cafecito, y poder adquirir un libro. Lamentablemente llegó la pandemia y llegó a destruir a todo”.
“Creo que algo importante es conocer nuestro mercado, conocer también nuestro nicho de mercado, también saber a qué tipo de lectores vamos a llegar. Mucha gente que ha trabajado conmigo estudió letras, eso nos permite conocer más o menos lo que se lee, lo que se ve. También tenemos muchos autores que son profesores. Lo que nosotros hacemos es una guerra de guerrillas librescas”, concluyó.
Escrito por:
Difusión CUCSH
Fotografía:
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Fuente:
CUCSH